3 horas de espera, moverme de una a otra oficina, responder interrogatorios académicos sólo con fines burocráticos, escuchar llamadas a esta y aquella y esa otra ciudad, presenciar cómo un par de papeles pueden hacer y deshacer mis planes... en uno de los lapsos en que nadie me hizo preguntas para que los trámites estuvieran correctos, decidí llamar para reportarme y confirmar el viaje. cambiamos la fecha de salida, será el sábado. no me jodas, sólo por eso volví hoy. pasé bastante tiempo más en ese edificio. al final, se medio arregló la cuestión.
- bueno, muchísimas gracias. hasta luego.
- no, al contrario, mija... de verdad que gracias a ti. por tu paciencia.
bueno, al menos la vida me dio una palmadita en la espalda pa' que no me agüite.